Ivanka Trump, hija y asistente del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró hoy que “miles de mujeres” pueden dar fe de que su padre cree en su potencial y defiende que ellas pueden realizar un trabajo igual de bien que un hombre.
Ivanka realizó estas declaraciones frente a las críticas que recibe su padre y tras ser abucheada en su participación en una mesa redonda sobre mujeres organizada durante el G20, que preside por turno Alemania, en la que participaron también la Canciller alemana, Angela Merkel, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, y la reina Máxima de Holanda.
De acuerdo con información de EFE, la hija del presidente estadunidense enfrentó una audiencia difícil tras llamar a su padre un campeón en el apoyo a las familias y señaló: “Miles de mujeres que han trabajado con y para mi padre durante décadas pueden dar testimonio de su sólida convicción en el potencial de las mujeres y su habilidad para hacer su trabajo tan bien como un hombre”.
Ivanka, que fue interrogada sobre las polémicas declaraciones de su padre sobre las mujeres, agregó que ella creció en una casa “sin ninguna barrera” en la que no había “diferencias” entre ella y sus hermanos.
“Cuando no estoy de acuerdo con mi padre, él lo sabe”, señaló.
La asistente del presidente añadió además que su padre desde la campaña ha insistido en la necesidad de instaurar en EU las vacaciones remuneradas, y recordó que su país es la única economía desarrollada que no incluye este beneficio social que repercute directamente en la vida familiar.
Ivanka Trump se mostró “contenta” de vivir en un país que tiene “menores problemas” en cuestiones de género que otros, pero reconoció que en EU también persisten dificultades para las mujeres.
El objetivo es similar en todos los países, pero la forma de alcanzarlo será en cada lugar distinta, dependiendo de elementos locales, agregó.
“Nos queda mucho para llegar a ese objetivo”, subrayó la hija del presidente de Estados Unidos.