Desarrolla UNACH investigación sobre  producción de búfalos en Chiapas

Desarrolla UNACH investigación sobre producción de búfalos en Chiapas

  • La carne de búfalo y sus derivados, son fuente importante de nutrientes.

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- La ganadería es un importante sector para el desarrollo y la economía de la entidad, bajo esta premisa, el académico de la UNACH, Hubercein Ramírez Barrios, realizó la investigación: “Análisis de la situación actual de la producción de búfalos en el estado de Chiapas”.

Al respecto, señaló que la producción del búfalo en Chiapas surgió como una solución alternativa al ganado bovino, ya que se concentran mayormente en zonas pantanosas y terrenos no aptos para la producción pecuaria; sin embargo, el búfalo si se siente cómodo en estas regiones.

“Esta especie ha representado una excelente opción de producción para zonas tropicales y subtropicales, dado que son una importante fuente de proteína para el consumo humano, al contar con carne y leche de buena calidad, incluso superando en producción al ganado vacuno”, aseguró

En ese sentido, enfatizó que la leche de búfala es una de las más ricas en materia seca, conteniendo altos porcentajes de grasas, proteínas y minerales, además de que contiene una menor cantidad de colesterol y es fuente de vitamina A.

En cuanto a la producción de carne, también es más saludable, ya que contiene menos porcentaje de colesterol, presenta más omega 3 y ácido linoleico, una mayor cantidad de proteína y es baja en minerales respecto a la carne vacuna, por eso la importancia de la producción del búfalo en Chiapas.

“Es oportuno incorporar estrategias de  producción para fomentar el desarrollo de este tipo de ganadería sustentable, además de implementar protocolos de prevención y control de enfermedades en las unidades de producción de la citada especia”, remarcó. 

Es  importante recordar que el búfalo de agua es originario de Asia y su nombre científico es bubalus bubalis, fueron introducidos a México en la última década del siglo XX, y tras treinta años de adaptación, su producción se extendió a varios estados del país, entre ellos Chiapas.