• Actualmente, el estado cuenta con nueve hospitales con licencia para llevar a cabo acciones de procuración y trasplante de órganos, células y tejidos
Durante la Primera Sesión Ordinaria del Consejo Estatal de Trasplantes de Chiapas, el gobernador Rutilio Escandón Cadenas externó su satisfacción al reconocer el avance que la entidad ha registrado en esta especialidad médica, pasando del lugar 27 al 9º. a nivel nacional en materia de donación y trasplante de órganos y tejidos.
Lo anterior, explicó el mandatario, se debe al trabajo del personal de salud y las estrategias impulsadas para que las clínicas y los hospitales de alta especialidad cuenten con infraestructura de calidad, equipamiento tecnológico moderno, medicamentos, insumos y el personal suficiente para atender a la población.
Detalló que en 2018 Chiapas solo contaba con tres hospitales con licencia de trasplantes de órganos, células y tejidos, y actualmente se han sumado otras seis unidades médicas, las cuales obtuvieron la licencia, lo que demuestra el acompañamiento y el trabajo conjunto para elevar la cobertura de salud en este rubro.
Por su parte, la directora del Centro Estatal de Trasplantes, Krystell Dávalos Barrientos, informó que gracias a los logros alcanzados dentro del Programa Estatal de Donación de Órganos con Fines de Trasplante, Chiapas se posiciona como un estado de donantes a nivel nacional, con un total de 81 donaciones de órganos y tejidos, y 57 trasplantes renales y córneas.
Dio a conocer la estrategia “Cuidando mi trasplante”, que permitirá a los hospitales que cuentan con licencia de este tipo otorgar de manera gratuita los medicamentos a pacientes sin seguridad social, así como los estudios necesarios.
Al respecto, el encargado de despacho de la Secretaría de Salud, Francisco Mariscal Ochoa, mencionó que es invaluable el trabajo que se ha establecido entre todas las instancias sanitarias para mejorar integralmente el Sistema de la Salud de Chiapas.
Finalmente, el secretario de Protección Civil, Luis Manuel García Moreno, detalló la importante contribución que las aeronaves oficiales, convertidas en ambulancias aéreas, han otorgado para el traslado de órganos y tejidos, conforme a los protocolos establecidos, a fin de que lleguen a su destino de manera eficaz y en buen estado.