En el marco de los trabajos de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, legisladores alzaron la voz en defensa de los connacionales que residen en Estados Unidos, expresando su firme oposición a cualquier intento de gravar las remesas que envían a sus familias en México.
Durante la sesión, se subrayó que las y los migrantes mexicanos aportan más de 320 mil millones de dólares a la economía estadounidense, por lo que cualquier intento de imponer un impuesto del 5 % sobre las remesas sería no solo injusto, sino también un acto que atentaría contra los derechos y el bienestar de millones de familias mexicanas.
Los integrantes de la Comisión coincidieron en la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección para la comunidad migrante y de garantizar que el envío de remesas siga siendo un canal libre de cargas impositivas, reconociendo el esfuerzo y sacrificio de quienes, desde el exterior, siguen contribuyendo de forma vital a la economía nacional.
Asimismo, se reiteró el compromiso del Poder Legislativo mexicano de mantenerse vigilante y activo frente a cualquier política extranjera que afecte los derechos de las y los mexicanos en el exterior. “¡No están solas ni solos!”, fue el mensaje contundente dirigido a los millones de compatriotas que sostienen a miles de hogares en nuestro país.
Este posicionamiento reafirma que las remesas no son un lujo ni un privilegio, sino un acto de amor y responsabilidad familiar que debe ser respetado por todos los gobiernos. Desde México, se seguirá abogando por condiciones justas para las y los migrantes en cualquier parte del mundo.
